Hoy más que nunca, las pymes se enfrentan a enormes retos y obstáculos. Siempre, pero mucho más en un marco económico inestable o en crisis, es necesario extraer todo el potencial de herramientas como las que proporcionan los planes de marketing digital.
Es cierto que la inmensa mayoría de las pymes realizan ímprobos esfuerzos por mejorar sus procesos de producción, elevar la calidad de sus productos y servicios y ofrecer una atención al cliente cada vez más más cuidada. Sin embargo, de poco sirven las buenas intenciones si no se sabe llegar al destinatario de los bienes o servicios. Es en este aspecto donde se puede sacar el máximo provecho a los planes de marketing digital.
Internet es hoy en día el gran vehículo de los negocios. Aprovecharse de todo lo que ofrece es conseguir ventajas competitivas de las que las pymes no pueden prescindir. Todo pasa por la red, por eso es fundamental ganar visibilidad en ella. Y una de las herramientas básicas para conseguirlo es el diseño de planes de marketing digital.
Las bases de la estrategia
Elaborar planes de marketing digital para pymes es mucho más complejo de lo que a simple vista pueda parecer. No es simple publicidad ni sirve cualquier idea. Para que den los resultados obtenidos es esencial todo un proceso a veces largo y complicado en el que entran en juego muchas variantes.
El primer paso de los planes de marketing digital es, ineludiblemente, la realización de un profundo análisis de las herramientas de las que dispone la empresa. Y es este capítulo entran blogs, webs, redes sociales, etc. Es necesario saber cuál es la respuesta de los usuarios, si las estrategias SEO están bien planteadas y se ha alcanzado un buen posicionamiento en buscadores, cuál es el índice de conversión, etc.
Junto a ello, es importante analizar el entorno en el que se mueven las pymes, conocer a la competencia y delimitar el público objetivo al que se van a dirigir las campañas. Si a ello se añade el análisis de las propias competencias y debilidades, ya se contará con una buena base para diseñar los planes de marketing digital.
Sin embargo, no es suficiente. Para que esos planes de marketing digital para pymes den los frutos deseados es necesario plantear objetivos. Deben ser metas ambiciosas pero realistas y con un plazo marcado para su consecución. Son los llamados objetivos SMART: específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales.
El plan de acción
Con los datos obtenidos hasta el momento y con unas metas bien planteadas hay que diseñar las estrategias dentro de esos planes de marketing. Y estas pueden ser muy variadas en función de toda una serie de factores, determinados por características que pueden diferir según las pymes: objetivos, usuarios a los que se pretende llegar, canales elegidos, etc.
Y tan variadas son las estrategias como pueden serlo los canales elegidos para conseguir esos objetivos de los planes de marketing digital: desde explotar mejor las redes sociales a poner en marcha un blog, desde diseñar una página más atractiva a trabajar todos los aspectos que afectan al SEO, desde campañas de mailing a crear podcast, etc.
Ya tenemos el engranaje en marcha, ¿y ahora qué?
Puede parecer que lo más difícil ya está hecho. Nada más alejado de la realidad. Ahora queda esperar, medir todo lo que se pueda medir (visitas, conversiones, alcance de las publicaciones, seguidores…) y tomar decisiones. Si todo va bien, perfecto. Pero no hay que dormirse en los laureles porque en marketing digital las cosas cambian de un instante a otro, mucho más en el caso de las pymes, casi siempre en la cuerda floja.
Y, en el peor de los casos, si esos planes de marketing digital no funcionan como se esperaba, habrá que retomar el proceso para ver en qué se ha fallado y poner solución cuanto antes. Un aspecto que requerirá, de nuevo, de un profundo análisis.
Esta última (metas que no se han alcanzado) es una posibilidad, pero no es lo habitual si los planes de marketing digital se han diseñado correctamente desde el primer momento. Si hay una buena planificación, si se cuida cada uno de los pasos, el resultado será una mayor visibilidad de las pymes y, por tanto, un mayor número de usuarios y beneficios.